Muchas veces hemos hablado de las distintas formas de clasificar el vino o de las maneras de diferenciarlo o conocerlo un poco más. Pero en esta ocasión nos centramos en la edad del vino joven, roble, crianza, reserva y gran reserva.
¿Cuál es la edad del vino?
La edad de cada vino hace referencia al tiempo de envejecimiento que ha pasado el vino tanto en barrica, como en botella antes de ponerse a la venta. Y aunque ésta puede variar según los Consejos Reguladores de las distintas Denominaciones de Origen, a grandes rasgos podemos clasificarlos tal y como indicamos a continuación.
La edad del vino joven
Los vinos jóvenes, o vino cosechero, son aquellos que no pasan tiempo en barrica, o al menos no el suficiente para que puedan llevar la etiqueta de ‘crianza’. Este tipo de vino está más indicado para consumirlo ese mismo año, o a muy tardar antes de que cumpla 18 meses.
¿Cuál es la edad del vino roble o semi-crianza?
El vino roble ha permanecido un tiempo en barrica, pero sin llegar al periodo establecido para ser crianza. Este tipo de vinos ofrecen las ventajas del vino joven más afrutado, junto al toque de aroma que le da su corta estancia en barrica.
Otra de las diferencias de los vinos robles respecto a los jóvenes, es que los robles tienen una vida un poco más larga que los más jóvenes.
¿Qué edad tiene el vino crianza?
Los vinos etiquetados como crianza empiezan a comercializarse en su tercer año, después de pasar al menos uno en barrica. El resto del tiempo hasta completar los tres años, este vino envejece en botella antes de etiquetarse.
Dependiendo de lo bien que se almacene, los vinos crianza pueden aguantar en buenas condiciones de cinco a diez años.
La edad del vino reserva
Para que un vino se considere como vino reserva debe haber estado mínimo un año en barrica, como el de crianza. Pero aparte, deberá haber estado sometido a mínimo tres años completos de envejecimiento. Estos vinos son seleccionados por su gran calidad.
¿Qué edad tiene un vino gran reserva?
El vino gran reserva es aquel más viejo y de mayor calidad. Estos sólo pueden elaborarse con cosechas excepcionales y uvas de gran calidad.
En cuanto a la edad del vino gran reserva, estos permanecerán como mínimo dos años en barrica y tres en botella. En total se trata de un vino que necesita cinco años para envejecer.
¿Qué características le otorga la madera al vino en barrica?
Lo que hace que un vino más joven o viejo tenga un sabor, y color diferente, es entre otras cosas, el tiempo que pasa en barrica.
Cómo actúa la barrica en el vino
Los vinos que pasan por barrica potencian y modifican sus características iniciales. Por tanto, dependiendo del tipo que pase el vino en barrica, en contacto con esta madera, los cambios en el caldo podrán apreciarse en mayor o menor medida.
Las características más destacadas del vino que ha pasado más tiempo en barrica son un tono más oxidado, aromas más tostados y avainillados en nariz y mayor estructura en la boca.
¿Por qué se mete el vino en barricas de roble?
Existen muchos tipos de barricas, pero las de roble se han consolidado como una apuesta por la calidad. Y así lleva siendo desde hace cientos de años.
El vino que envejece en la barricas de roble vive cambios químicos que mejoran su sabor inicial. Gracias al roble, el vino gana algunos de sus sabores y sutiles aromas propios de esta madera. Además, el vino que ha pasado por estas barricas de roble adquiere también toques de canela y otras especias, caramelo o vainilla; lo que hace que se el sabor del vino se redondee.
Por otra parte, cuando el vino permanece quieto en una barrica, todas las impurezas se van depositando en el fondo.