En la actualidad, existen una gran cantidad de formas en las que podemos clasificar a los vinos, desde su tipo como el tinto, rosado, blanco o azul, hasta si estos tienen gas, si cuentan con denominación de origen o incluso, de acuerdo con el tipo de uva.
Otra forma en la que podemos clasificar al vino es en función de su sabor. Por ello, es que aquí te hablaremos sobre un grupo de vinos los cuales destacan por su ligereza de sabor. Así es, aquí te contaremos todo sobre el vino suave.
¿Qué es el vino suave?
Existen dos formas de describir qué es el vino suave. La primera es una forma de referirse a un vino que tiene una baja acidez y un bajo contenido de taninos. Estos vinos son generalmente fáciles de beber y no tienen un sabor agresivo o amargo, por el término de suave. Suelen ser vinos ligeros y afrutados como algunos vinos rosados y blancos jóvenes.
Por otro lado, en Latinoamérica, sobre todo en países de gran tradición vinícola como Argentina, el término vino suave se refiere a los vinos que tienen un contenido de alcohol reducido. Estos vinos se producen utilizando un proceso de fermentación que se detiene antes de que todo el azúcar se convierta en alcohol.
En ambos casos, el concepto de vino suave hace referencia al sabor el cual suele ser mucho más dulce mientras que la intensidad del vino es mucho menor que en otras variedades.
¿Por qué un vino se denomina como suave?
Para que un vino sea considerado como suave, en primer lugar se debe analizar la cantidad de taninos y la acidez del mismo. Los vinos tintos tienen una mayor cantidad de taninos lo que hace que sean astringentes, ácidos y fuertes.
Otro punto que se valora para determinar cuál es el vino más suave es la cantidad de azúcar en el vino. Por ejemplo, los vinos rosados o azules suelen tener más azúcar, al igual que los espumosos, lo que hace que sean mucho más suaves pues lo dulce contrasta lo ácido.
Por último, en algunos viñedos se tiene en cuenta el sabor como el último punto, así como el origen, tipo de uva y fermentación para saber cuál es el vino más suave. También se suelen clasificar en rankings que van de los más ácidos o de sabor más fuerte a los más ligeros.
¿Qué implica que un vino sea suave?
Que un vino sea suave implica que su sabor y aroma no son fuertes ni ásperos, sino que son agradables y fáciles de beber. Generalmente, un vino suave tiene menos acidez y taninos que otros vinos, lo que lo hace más equilibrado y menos astringente en el paladar.
Además, un vino suave también puede tener un contenido de alcohol más bajo y un sabor más afrutado y fresco. Todo esto hace que, para aquellos que no beben vino, el vino suave sea mucho más fácil de disfrutar.
¿Cómo se crea un vino suave?
La suavidad en un vino puede lograrse de varias maneras, dependiendo en gran medida del estilo del vino que se está produciendo en el viñedo. Estas son algunas formas de hacerlo:
Selección de uvas: Los enólogos pueden seleccionar uvas específicas con una acidez más baja y una mayor madurez para producir vinos con menos amargor y una textura más suave.
Fermentación maloláctica: Esta técnica lo que hace es convertir el ácido málico más duro en ácido láctico más suave, lo que reduce la sensación de acidez y aumenta la sensación de suavidad en la boca.
Reducción del tiempo de maceración: El tiempo de maceración, que es lo que dura el mosto en contacto con las pieles y semillas de la uva, se puede reducir para evitar extraer taninos de más, así como otros compuestos duros que pueden contribuir a una sensación más áspera en el vino.
Maduración en barrica: Otra forma de tener un vino suave es mediante el envejecimiento en barrica de roble el cual puede ayudar a suavizar los taninos agregando notas de vainilla y especias que contribuyen a la suavidad del vino.
Mezcla con otros vinos: La mezcla con vinos de otros lotes o variedades puede ayudar a equilibrar el sabor y la textura del vino, creando un vino más suave y fácil de beber. Esto es común en otras bebidas como el Whisky donde los blended, mezclas, dan como resultado un whisky mucho más suave y ligero.
¿Cuáles son los 4 vinos más suaves del mercado?
Si bien saber cuál es el vino más suave dependerá mucho de quien lo beba, estas son algunas opciones populares que encajan bien bajo esa descripción.
- Pinot Noir: Este vino tinto es conocido por ser ligero y delicado con taninos suaves y poco astringentes.
- Merlot: Otra opción de vino tinto que suele tener un perfil suave con taninos suaves y sabores frutales.
- Chardonnay: Este vino blanco suele ser cremoso y suave en la boca con sabores a mantequilla y vainilla.
- Riesling: Este vino blanco tiene una acidez equilibrada que lo hace suave y fácil de beber con notas florales y de frutas como manzana y pera.
Otras opciones que podemos considerar entre la lista de cuál es el vino más suave son los vinos rosados, los vinos espumosos y los vinos azules los cuales, comparados con los vinos tintos, tienen mejor acidez y menor presencia de taninos, ergo, son más dulces.
¿Cómo beber un vino suave?
Ahora que conoces a los competidores por ver cuál es el vino más suave es importante saber cómo debes beberlos. Un punto importante es la temperatura. Los vinos suaves se sirven a una temperatura ligeramente fresca, entre 12 y 16 grados Celsius, para no afectar los sabores. Para acompañar un vino suave se pueden utilizar alimentos que no tengan sabores muy intensos como pescados, mariscos, pastas, arroces, carnes blancas, ensaladas y quesos suaves. También recomendamos evitar exponer al sol al vino suave para que este no afecte su balance y sabor.