Que vayan unos amigos a cenar y te regalen una buena botella de vino, salir un día de picnic y amenizar la comida con un buen vino, una cena romántica con velas, música ambiente y… vino… Todos estos momentos ideales pueden dejar de serlo tanto por un momento si de repente nos damos cuenta de que, ¡nos falta el sacacorchos!
Si te encuentras en alguna de estas situaciones, o quieres evitar encontrarte, atención a este post de Bodegas Perfer, porque os enseñamos algunos trucos para poder disfrutar del vino aunque no tengamos un sacacorchos a mano.
1.- Abrir la botella de vino con un cuchillo
Intentar abrir la botella con un cuchillo es uno de los métodos más habituales, dado que es raro no tener este objeto a mano si estamos en casa o disfrutando de una buena comida.
Con este método aconsejamos usar el sentido común y tener especial cuidado con que no se resbale el cuchillo y nos cortemos.
Para que este truco funcione trataremos de buscar un cuchillo cuya punta encaje bien con el corcho, si es de sierra podremos sujetar más fácilmente el tapón. El siguiente paso será clavar el cuchillo, moviéndolo de atrás hacia delante y ejerciendo un poco de presión, pero cuidando de que no atraviese por completo el corcho para que no caigan trozos de este al vino. Una vez clavado el cuchillo lo giraremos con cuidado intentando que el corcho no se destroce.
Cuando el corcho comience a girar suavemente, sólo tendremos que seguir girando el cuchillo mientras tiramos un poco de él hacia arriba. Podrás observar que el corcho va saliendo como si de un tornillo se tratase.
2.- Abrir la botella con un tornillo y unos alicates
Esta forma es una de las más fáciles y efectivas de abrir una botella de vino sin abridor. Para ello tan sólo necesitaremos un tornillo y una herramienta con la que sujetar la cabeza del tornillo o el clavo, preferiblemente unos alicates. Cuanto mayor sea la distancia entre las roscas del tornillo, mejor.
Lo primero que haremos será introducir el tornillo en el corcho, pero siempre dejando como mínimo un centímetro para poder sacarlo luego más fácilmente. Si no puedes meterlo con las manos puedes utilizar un destornillador, pero siempre con cuidado de que el corcho no se haga añicos.
Una vez dentro puedes usar un alicate para sacar el tornillo, la uña de un martillo o un tenedor.
3.- Utilizar clips para abrir la botella de vino
Si tienes dos clips a mano puedes intentar abrir el corcho de la botella utilizándolos. Para ello pon los clips parcialmente rectos, dejando en las puntas la forma de U intacta. Hinca en el corcho los clips, uno a cada lado del corcho, cuidando de que la U quede hacia arriba.
Después trata de unir los otros dos extremos de los clips que han quedado fuera de la botella (estos deben tener la forma de U hacia abajo). Para tirar de los clips puedes meter un lápiz, un bolígrafo o el mando de un cubierto. Desliza los dedos por debajo del utensilio, con los alambres entre tus dedos y tira del corcho despacio.