Disfrutar del vino significa poner todos los sentidos en juego. Por eso, entrenar los sentidos como la vista, el olfato, el gusto, y hasta el oído, pueden hacer que el vino se disfrute más y mejor.
Entrenar los sentidos es algo sencillo que todo el mundo puede conseguir, de hecho ya os hemos hablado sobre eso en alguna otra ocasión cuando hemos mencionado los pasos para aprender a hacer una buena cata de vino. No obstante, hay que tener en cuenta que algunas personas tienen unos sentidos más privilegiados por cuestiones genéticas, con umbrales de percepción mucho más amplios. Por lo que para ellos este proceso será más sencillo. Mientras que para el resto lo normal es tener mucho margen para mejorar poco a poco y aprender a disfrutar más del vino en cada sorbo.
Catas de vino para entrenar los sentidos
Como ocurre con todo, entrenar los sentidos para disfrutar mejor del vino se consigue con práctica. O lo que es lo mismo en este caso, catando, que no es lo mismo que simplemente beber vino. Pero junto a la práctica, no podemos dejar de lado la paciencia ni la constancia.
Al descubrir nuevos matices, iremos poco a poco descubriendo un abanico mucho más amplio de sabores. La mejor forma de desarrollar los sentidos es por tanto probando diferentes vinos. Para ello os aconsejamos probar nuevos sabores y nuevas marcas. También será importante en este aprendizaje hacer catas de vino en bodegas y viñedos. En Bodegas Perfer organizamos catas de vino en pareja o grupo. En ellas, además de visitar los viñedos y la bodega, damos a probar nuestros vinos y, por supuesto, algunas pautas de cómo debe hacerse la cata para disfrutar mejor del vino.
Cómo entrenar la vista para disfrutar del vino
Al igual que nos ocurre con las personas, el disfrute del vino comienza con la fase visual. Al catar vinos, no es lo mismo mirar que ver.
El primer paso será conocer si se sufre algún tipo de limitación visual como puede ser el daltonismo O cualquier otra anomalía que requiera el uso de gafas.
En la evaluación visual del vino es importante prestar especial atención. Se tendrá que comparar cada tipo de vino con el resto de variedades, y así apreciar mejor los tributos de cada uno.
La mejor manera de avanzar en la evaluación visual de un vino es prestar especial atención durante esta fase y comprar entre distintas variedades para así apreciar más claramente los atributos de cada una. Puedes leer en otros posts lo que el aspecto del vino puede decirnos sobre ellos.
El olfato y el vino
Cuando alguien entrena sus sentidos consigue apreciar y enumerar los distintos aromas que desprende cada tipo de vino. Pero para conseguirlo es necesario practicar. Para poder reconocer los distintos aromas, previamente habremos tenido que archivarlos en la memoria. Para identificarlos podemos familiarizarnos con el vocabulario de las familias olfativas.
Por ejemplo, puede practicarse con un set de aromas que pueden adquirirse en estuches, en Internet o tiendas especializadas.
Para entrenar el olfato y aprender a disfrutar y reconocer el vino no sólo tendremos que practicar oliendo vinos. Se puede mejorar poniendo especial atención a todos los estímulos olfativos que tenemos a diario a nuestro alrededor. Poco a poco iremos descubriendo todo un mundo de sensaciones y olores.
Entrenar el gusto para catar mejor
Una forma de entrenar el gusto para aprender a disfrutar del vino es conocer y observar qué parte de la boca percibe cada tipo de sabor. Así podremos ir aprendiendo a diferenciarlos con más facilidad. Los sabores más dulces se perciben por la punta de la lengua. La acidez por los laterales y los taninos por la parte interior, así como por la sensación astringente que dejan al tragarse.